Todo es posible y nada es imposible en el maravilloso mundo de las letras. ¿Te atreves a adentrarte en ella?
18 de agosto de 2009
Primer capítulo de Playing with fire
Este libro por los momentos va de 4to lugar, pero realmente me llamo la atencion y lo comence a traducir, asi que me parecio una muy buena idea que ustedes pudieran leerlo al igual que yo
Capitulo 1
¿No es increíble cómo una decisión aparentemente inocente puede cambiar toda tu vida? Para mí, aquella decisión llegó en la forma de un gran café moka.
Permítanme explicarles.
El día comenzó bastante normal. Traducción: rodé de cama treinta minutos tarde, me apresuré por ducharme y vestirme con los pantalones negros y el botón blanco que cada empleado de Utopia Cafe deberia llevar. A diferencia de los otros empleados, yo le quité los tres primeros botones a mi camisa, revelando el borde de mi sujetador. No me juzgues. Algunas personas tienen un busto desafiante que necesitan un pequeño empujón. Y de todos modos, si yo muestro mi escote, mi jefe no tendrá problemas en que yo llegue tarde. Otra vez. El todavía me podría agradecer por venir.
¿Estuvo mal confiar en chicas para sacarme del problema? Probablemente. ¿Me importa? Claro que no. De hecho, los ajusté avergonzadamente para una amplia demostración. Yo estoy soltera, con 24 años y determinada a mantener este trabajo. Cualquier persona que se opusiera a mandarme a volar. Me explico, mi padre sufre graves problemas del corazón, y yo soy la "responsable" a cargo de sus fracturas, por no mencionar la finanza por su estancia en Village on the Park, un centro de vida cercano que lo ayuda. a mi me hubiese gustado que el viviera conmigo, (no es que haya bastante espacio en mi habitación*), pero es lo mejor que él se quede donde está. Ellos lo supervisan las veinticuatro horas y se aseguran que él toma sus medicaciones, lo cual se le "olvida" de hacer cuando lo dejo a su propia suerte. Además, el me dice que nunca ha sido feliz. Y afirma que las mujeres son "zorras" que necesitan de la atención masculina. ¿Puedo mencionar que las zorras son mucho más costosas que las putas, porque mi papa siempre aparecía con el Viagra que le compraban sus amigos? Yo tengo que hacer algo para que mi papá sea feliz, así como él de manera desinteresada se aseguróde mi felicidad en toda mi niñez. Entonces tengo que mantener mi trabajo y conseguir el que me estoy entrevistando después de mi turno.
No puede ser tarde, no puede ser tarde, no puede ser tarde, cantaba mentalmente mientras buscaba mis tenis manchados de capuchino. He derramado más capuchino en ellos de lo que le he servido a la clase alta. Y valga decir que, yo le he servido muchísimo café a ellos. "Ajá, los encontré, pequeños y sucios bastardos" ¿Cuándo yo los había puesto en el refrigerador? Me los puse, y el escalofrío creció al igual que los dedos entumesidos por el frio. Mientras tanto, el reloj marcó que ya se había ido un precioso minuto.
Apresuradamente me apliqué el rubor, el rimel y el labial. Seguro pensarías que la necesidad de conseguir dinero me motiva a pararme muy temprano en la mañana, pero te equibocas. Anoche estaba bebiendo con unos amigos en una fiesta Bachelorette.
3:00 am. Yo, una chica que no sabe nada de alcohol. Sexo en la playa con el hombre adecuado. ¿Ombligo... uh Borroso, ducha, alguien? ¿Tom Collins-quién el infierno? Por supuesto, yo habñai fingido haber reclado para estar en la entrevista. Mis bebidas no habían sido las más sabrosas, pero seguramente habían creado los resultados deseados. Al final de la tarde, todas las mujeres embriagadas juraron que ellas amaban.
El reloj marcó la hora: 6:00am
"Maldita sea" Rocé mis quemados y cansados ojos, cuando comprendí que el rimel aun no se había secado. Maldición. Probablemente parecía un boxeador que había perdido el gran partido. Como he lavado mi cara con un paño húmedo y bebí mis plantas secas. ¿Que podria tomar para que los mounstros verdes prosperen? Finalmente, lista para salir, tuve sumergir mi mano dentro de la pecera para extraer las llaves. ¿Cuántas bebidas había tomado la última noche? Yo no recuerdo a mis llaves cayendo en el agua. Al menos, el envase actualmente se encuentra sin un pez. Martin, mi betta*, había muerto hace un par de días. Causas naturales, se los aseguro.
"Espero que estes pudriéndote en las alcantarillas", le dije, mirando hacia abajo. De ninguna alguna manera había ido al cielo. El pequeño mocoso me odiaba. Siempre abriendo sus branqueas y golpeandose contra el vidrio cuando yo camina en la habitación. Él había sido un regalo de mi último novio, cuyo alias era El Principe De La Oscuridad. ¿Fue un error desear que mi ex muriera junto a su pez? No hay tiempo para considerar la ética de aquel sueño ahora. Tuve que irme. ¿Vestido? Listo. ¿Zapatos? Listos. ¿Llaves? Listas.¿Currículo? Listo. Yo había rellenado mis pantalones anoche para prepararme para la entrevista de hoy. Ugh. Sin embargo, otro trabajo de baja categoría. Si sólo yo pudiera irme lentamente de nuevo a la cama, acurrucarme bajo las sabanas y seguir mi sueño No apto para menores de 18 años sobre Vin Diesel y un tubo de apretón fácil de jarabe de chocolate. Doble yum! Algo sobre aquella cabeza calva me puso salvaje.
Dejar de soñar despierta, mujer. Caminé trabajosamente hacia puerta que dirige a la calle y el telefono sono. Suspire, y corri directo a mi dormitorio. Probablemente era mi jefe, Ron, pero quise verificar dos veces por si acaso. Una ojeada rápida en la identificación de la llamada reveló que era mi papá. Más tarde fui, yo ni siquiera pensar en dejar que la máquina recoger. Agarré al receptor y lo sostuve a mi oído.
"¡Eh!, Papá. "
" ¡Eh!, muñeca. ¿Qué estas haciendo? "
" Voy a irme a trabajar. ¿Todo bien? "
"Bien, muy bien" su voz nunca deja de consolarme. "Tu trabajas demasiado".
"Si, pero tu sabes que para eso yo vivo" Y mis voz celebro la verdad. Yo nunca le haria saber que no me gusta mi trabajo, porque de lo contrario el habría venido y me trajera y viejo peluche. No es de extrañar que yo la amara muchisimo. "Yo no soy feliz si no estoy trabajando".
"Al igual que su madre, en paz descanse su alma. Nunca comprenderé eso". Lo imaginé sacudiendo su cabeza en la admiración. "No voy a mantenerlo. Acabo de mirar a los viejos albunes de fotos tuyas cuando eras una bebe. Se que me vsisitaste el otro dia, pero queria escuchar tu voz".
Ves, el es dulce. "Ahora estas tratando de hacerme llorar. Pero me alegro que hayas llamado. Y yo también te he extrañado".
El rio en silencio "Nosotros solo somos un par de pastosos.." "¡Oh, diablos", dijo a mí. Para la mujer, que murmuraba: "Ahora no, María. Estoy en el teléfono con mi mejor chica".
"¿Te has besado o no con Janet en los jardines de anoche?" María se exige en el fondo.
"Maldición", susurró mi padre. Luego, "¡Oh, mierda! Creo que su silla de ruedas esta mi habitación ". Él hizo una pausa. "Creo que debería haber resistido la invitación de Janet para un paseo".
"Creo que lo deberan tener" le dije con una risa.
"Tengo que irme ahora. Te quiero, muñeca ", dijo.
"¡David!" Llamada María, más cerca ahora.
"Te quiero también, papá."
Ya habia finalizado la llamada, asome una sonrisa en los labios. Sacudi mi cabeza, saliendo apresuradamente de mi diminuto apartamento con una mirada nostálgica hacia atrás.
"Vamos con otro dia" murmure. Fuera, la mañana débil de primavera demostrada maravillosamente fragancia de la magnolia, pero opresivamente caliente, el aire pegajoso con humedad. Ah, mierda. Había olvidado de traer una pequeña toalla para quitarme el sudor. En unos minutos, mi ropa iba a ser pegada a mi cuerpo. Ah, bien. Ya no podia hacer nada ahora.
No queria llegar con hambre en al trabajo (hambre=perra y perra=despedida), me detuve por un caramelo "dona de cristal" en mi camino a la estación de autobuses y pedi mi autobús. Marta, es un sistema de transporte, y por lo que acaba de ocurrir, tendre que esperar otros 20 minutos para que llegue el proximo autobus. Por el tiempo que corri en la utopía, las líneas fueron largas y sinuosas. Clientes sobre el molestos por esperar. Bostece. Quiero decir, por favor. Llorame un río, Richie Richersons. Jesus. Cualquier persona que podría permitirse una taza diaria de seis dólares de Joe sin tener que dejar algo. Ron, mi jefe, me descubrió y me dio un ceño de estas-muerta.
Cuadré mis hombros, así apretando el material de mi camisa, y le ofrecí una risa de helado de chocolate, sofocada en la nata montada y cerezas. ¡Um!, nata montada. Esto cabría amablemente en mi fantasía de Vin Diesel. La mirada fija de Ron conectada con las muchachas. Él palideció, mirado lejos y torciendo su dedo en mi dirección. Sin echar un vistazo para ver si notara, él giró sobre su talón, me ordeno silenciosamente que lo siguiera. Perfecto. Esto no es nada bueno.
Respirando profundamente el aire con aroma a canela y vainilla, pasé varios hombres y mujeres que usaban las mesas como mini-espacios de trabajo, sus computadoras, faxes y trituradoras de papel en torno a ellos. Di un paso en la oficina pequeña y apretada de Ron.
"¿Me queria ver, Sr. Pretty?"
"Es Peaty, y cierra la puerta", me dijo. Su voz carecia de emocion alguna. El se dejo caer en la silla. Su desordenado escritorio oculta su barriga. Su negra mirada permanecio dirigiendose hacia abajo, no hacia mi.
Mierda.
Mis manos ahora sudaban. Lo habia hecho como ordeno. Sin esperar a que me lo dijera, me sente en la otra silla que se encontraba en la oficina. Un taburete tieso e incómodo que me gustaba llamar la Silla Traviesa. Los archivos que se encontraban a mis lados se encontraban cerrados. Estudie a Ron. Él tenía labios delgados, y ahora mismo aquellos labios fueron presionados fuerte juntos, apenas eran visibles las barras de color rosa en los contornos de su cara rotunda. Su pelo era de un arena extremo, como si lo hubiera arado con su dedos demasiadas veces. Sus arrugas de los ojos y la frente se habían plegado.
Ron se había enojado conmigo mucho estas últimas semanas, pero él nunca había demostrado tal nivel de descontento. Tal determinación sombría. Reconocí la mirada, sin embargo. Yo la habia obtenido de misotros jefes el último año, justo antes de que me despidieran.
Yo di un suspiro ahogado. No había sido siempre una mala empleada. Durante casi cinco años, que había trabajado como camarera durante el día y de limpieza* durante la noche.Yo había hecho lo suficiente para pagar mis gastos y el apoyo de mi papá, así como construir una buena cuenta de ahorros, una cuenta de ahorros que había utilizado mi hiato, los dos meses que habia estado trabajando en este cafe.
¿Por qué no tengo ya mis inquietudes? ¿Por qué yo no podía anular mi descontento, ya que tuve para tantos años, y dejar de sabotear mi única fuente de ingresos?
Aunque no quería admitirlo, sabía la respuesta. Me desperta una mañana y me percata que la vida que pasa por mí, se desplazan a gran velocidad mientras yo me revolque detras. La insatisfacción me había llenado y sólo solo crecido desde entonces.
"Lo siento por todas y cada una de las cosas que no no habia hecho", le dije, cuando Ron abrió su boca para hablar.
"Llegaste tarde", él gruño. "De nuevo".
El hecho que yo no haya dicho, "Gracias por declarar el obvio," debería haberme ganado puntos. "Si, lo se, y realmente siento." Cuando su expresión no se ablandó, cuando él todavía no echaba un vistazo en mi dirección, mi corazón se cerro de golpe contra mis costillas. "He trabajado en otro sitio hasta altas horas de la mañana y tenía problemas para despertarme". Él miraba el reloj de pared justo detrás de mi cabeza y se ajusta su corbata manchada de chocolate. "Si bien me gusta la imagen de ti permaneciendo en la cama ". Bastardo enfermo. Yo podría haber vomitado en mi boca. De repente, con la esperanza de ocultarlo, encorve mis hombros.
Espere, Ron se estaba moviendo la boca. No había dejado de hablar.
"Eso es solo una buena excusa. Quiero decir, yo puedo hacer una excepción para que una vez o dos veces, pero hemos tenido esta misma conversación siete veces. Y tu has trabajado aquí sólo un par de semanas."
"Voy a estar a la hora mañana, tiene mi palabra. Voy a venir sin dormir si es necesario." ¿He sonado como una desesperada? Probablemente. Maldita sea. Odiaba a dejarle ver a mi desesperación. Lo odiaba, lo odiaba, lo odiaba. El sabia lo desesperada que yo estaba. Más él podría tirar mis cuerdas y hacerme bailar como un mono artístico.
El le dio un toque a su boligrafo contra su escritorio. "Eso es lo que usted dijo la ultima vez. Esto es una operación pequeña, independiente, Belle, y confiamos en nuestros empleados para proporcionar un buen servicio para mantenernos en el negocio. "
"Realmente proporciono un buen servicio," tragué aire, añadiendo, "cuando estoy aquí." Fruncir el ceño. El dejó caer la pluma y empujó una mano por su pelo. "¿Crees que eres buena con los clientes? ¿De verdad?
" Sí, realmente. " Yo sabía que pasaba aquí. Él vaciló sobre el borde de mi despedida y simplemente trataba de pronunciar las palabras. Y, comprendí con el miedo de la despedida, yo no podría hablar de esto con el de nuevo. Por este punto en nuestras conversaciones anteriores, él por lo general me enviaba sobre mi camino con una severa advertencia.
¿Tenía su irritación una determinación que no podia persuadir hablando dulcemente?
Mis ojos se reducieron; con mis manos apretadas en puños. Yo no le permitire deshacerse de mí fácilmente. De alguna manera, y de alguna forma, iba a penetrar en esa pared infame de determinación. No podía perder este trabajo. Últimamente muy pocas empresas estaban dispuestas a tener una oportunidad en mí, así que sólo podía imaginar como yo tendria que ir de un trabajo en otro.
"Estúpidos puestos de trabajo," murmure.
"¿Qué fue eso?" Preguntó Ron, con una nitida mirada
¿He dicho eso en voz alta? "Oh, eh, nada." Me enderezó en la silla.
"¿Decías?"
Él empujó a un suspiro. "Tu no tienes habilidades con las personas, Belle. En lugar de suavizar agitadas plumas, tu haces fuego con ellas".
"Le digo, yo soy una buena empleada," dije con dientes apretados. Y no era una mentira. Claro que generalmente llego tarde, siempre digo palabrotas, a veces puteo. Pero he trabajado los fines de semana, vacaciones y horas extraordinarias, siempre
posible. Esto cuenta para algo, ¿verdad?.
"No puedo creer que me estás haciendo esto." Ron volteado abrir un archivo buscando algo con punta de los dedos hacia abajo en la primera página. "El servidor es grosero e insistente. El servidor hizo el té en vez del café.El servidores grosero. El servidores grosero. El servidor es grosero. ¿Continuo?"
"No dejare que los clientes me griten". La indignación me dio el sentido del valor, y he incluso me sente recta, con hombros cuadriculados. ¿La gente no tiene nada mejor que hacer que quejarse de una humilde servidora? " Esto no me hace grosero, esto me hace el humana". "Jenni no le grita a sus clientes incluso cuando ellos gritan a ella." "Jenni es una idiota"
Otro suspiro. "Belle..." Finalmente, puso su fija mirada en mí y asi como el mira a las otras muchachas. Trago, su manzana de Adan se bamboleo como un bote en una ola gigante. "Uh, ¿qué iba a decir yo? " Casi sonreí abiertamente, cada músculo de mi cuerpo relajado. Lo persuadi completamente. Y mucho más fácil de lo previsto. Siendo estudiada fue muy diferente de escuchar sus comentarios de delincuente sexual acerca de mí la cama. Esto lo podría manejar. "Creo que estuvo a punto de decirme para ir a trabajar y nunca llegar tarde otra vez. A lo que le responderle que usted es el mejor jefe en el mundo y le haré sentir orgulloso."
"Si, quise decirle que la iba a..." Amplio sus ojos y sacudio su cabeza "no, eso no es lo que queria decir" dijo el. Su voz sonaba severa. Cerro sus ojos y pellizco el puente de su nariz. Él murmuró algo bajo su aliento que sonó desconfiado como ser derribado por un par de bonitos golpeadores. "Yo debería despedirte, tu lo sabes. Maldicion, es por eso que te traje en aquí".
"Lo sé", admiti suavemente. No significa ser una decepción para él. Honestamente. Yo sólo, bueno, yo siemre habia soñado a comenzar a esperar. Mis cejas se unieron. Incluso como una niña, yo no había sido capaz de decidir lo que quería ser cuando creciera. Yo todavía no lo sabía. Pero comenzar a ser un peon, atrapada ciclo de deudas y un sin fin servidumbres no ha sido, y no era la ambicion de mi vida.
No me malinterpreten. Para mi padre, yo habia firmado mi alma al diablo. Con tinta permanente. Sin cláusula.
Papá habia estado esclavizado trabajado durante años en la construcción, aun cuando su débil corazón le causó el dolor, que ninguna persona debería tener que soportar. Había trabajado tan duro porque él me ama, porque el me queria con lindas ropa y viajes de diversión con mis amigos. Pero sobre todo porque él había querido compensar el accidente de coche que había matado a mi mamá cuando yo era solo una niña.
Después de que gradué el instituto, yo lo había convencido de marcharse, y yo felizmente había tenido cuidado de él desde entonces. No lo lamenté; realmente no hice, pero mi vida se había caído en la monotonia que a veces realmente deseé para algo extraordinario me pasara. Algo asombroso, quizás un poco salvaje. Que yo no conocia.
Yo frunci el ceño. No iba a seguir deseando las cosas que yo no podria tener. A partir de este punto, yo sería una mejor empleada. Me podria trabajar más, ser menos conflictiva. Ron me estaba dando otra oportunidad, y no lo olvidaria. "Juro, Belle, que mantendras mi ulcera en forma bélica". dijo él misteriosamente. Él metió la mano en un cajón de suescritorio, saco un paquete de Tums y se metio varios a la boca. "Porque yo no voy a dejartelo pasar una vez más ¿lo entendiste? y si se repite, estas despedida". Suspiro una vez mas, lo que hizo que sus hombros se hundieran. "Es tu útlima oportunidad"
"No lo volvere a hacer. Juro por Dios." Yo no mencione que tenía que hoy tendria que irme un poco temprano si me esperaban para hacer la entrevista con Embajador Suites, un hotel cercano. I duplicaria de fabricacion de café o algo para ganar la primera partida. "Voy a ser tan buena que nombrara Empleado de la semana. Quizás Empleado del Mes ".
"Si. Claro. "Él apareció un poco más y Tums ojos a las niñas de nuevo. "No puedo creer que estoy haciendo esto. Ve. Abre un registro antes de que yo cambie de idea."
La sonreír abiertamente, lo hice volar con un beso, y saltado de mi silla corrí a la puerta. Gracias Dios por los pervertidos.
PASÉ VARIAS HORAS SIGUIENTES como una pequeña y buena robot, sonriendo con una risa de luz-del-sol-y-rosas y agitando a clientes a mi registro como una señorita el concursante de América. Todo bajo la mirada de Ron parecida a la de un halcon.
Una vez, llegué cerca boferear a una mujer que tuvo el descaro de preguntarme si me muevo lento con todos los clientes, o ella solo era especial.
Tu eres como un dolor en mi trasero yo se lo quería decir, pero no lo hice. Frene mi violencia, consolado por el pensamiento que una tan mala bruja seguramente adquiriría unas profundas arrugas y perdería todos sus dientes y pelo antes de que ella diera patadas.
Mi amigo Sherridan-el único amigo que tenía, realmente, ya que tomando en cuenta el hecho de que no tenía tiempo libre -hubiera estado orgulloso de mí por permanecer callada, pero eso no me expide lanzar una catapulta de venganza. Cuando nosotras estábamos en la escuela primaria, ella me había dicho que el diablo sobre mi hombro derecho brutalmente debe haber estrangulado al ángel a mi izquierda que destruye cualquier indirecta de influencia moral.
Hablando de Sherridan, ella dio un paseo en el café unos minutos más tarde, me vio y agito su mano para saludarme. Ella hablaba por su celular. Ella era alta y magnífica con rizos rubios y curveadoss que continuaron por siempre, las curvas que ahora fueron encajonadas en un traje pantalón de esmeralda. Ella me vio, evitando la línea para estar de pie al lado de mi registro, y enganchó su celular a su cintura. " ¡Eh!, tu," dijo ella con una calida sonrisa
"Hey, voltea" dije yo, manteniendo la mirada en el cliente, pretendiendo escuchar su orden. Me encantó cuando me visitó Sherridan aquí. Técnicamente, los empleados fueron desalentados con el hecho de tener invitados, pero últimamente era el único tiempo que pasamos juntas. "Te ves bien".
"Gracias." Ella hablaba sobre el fruncir el ceño al cliente. "Hoy en la tarde estaré mostrando una casa y deseo impresionar al comprador-que es la mitad de la razón por la que estoy aquí."Ella aplaudía sus manos en el entusiasmo. "Tengo nuestras citas".
"¿Citas?" Varios meses habían transcurrido desde que había pensado siquiera en la palabra, por lo que fue como una lengua extranjera. "¿Desea espolvoreado de canela en cafe?" Le pregunte a mi cliente. "Con los gemelos", dice con orgullo Sherridan. "Ricos gemelos".
"Sí", dice el cliente con los labios apretados. Sherridan no hizo la pausa. " Pienso que le gustare al mayor" Había un remordimiento de incertidumbre de su voz.
"Estoy segura que le gustaras," dije. "Eres hermosa y simpática." A Sherridan le gustó fingir que ella era confidente, pero en el fondo ella lo reaseguro cuando volviamos a los hombres. Ella tiende a enamorarse de ellos rápidamente, hacerse horriblemente necesitada e insegura, y los ahuyenta. "Estoy trabajando esa noche, aunque."
Sherridan la sonrisa deslizó un poco, y redujo su plata ojos con recelo. "Yo no le dijo-" su
teléfono sonó "cuándo".
"¿En algún momento del dia de hoy se podra ocupar de la bebida?", dijo mi cliente, dando golpecitos con las uñas en el mostrador.
“No importa el dia.” voltee, tomando un cartón de leche y depositando una medida en el contenedor apropiado. “siempre estoy trabajando.”
“Leslie,” Sherridan le dijo a su asistente, “Este no es un buen momento. Estoy en una reunión.” colgó.
“Belle, ¿no te puedes tomar un día de permiso? ¿Solo uno? ¡Por favor!”
Una ola de añoranza me golpeo, pero no hable por varios segundos mientras la leche hervía, zumbando fuertemente
Cuando el sonido callo, dije, “desearía poder, Sher, pero mas tarde tengo una entrevista para un segundo empleo y estaré trabajando durante las noches si me lo dan.”
“No otro,” dijo ella con un gruñido.
“Hey, chica de servicio. Puedes darme un ETA en mi bebida? Estoy apurado, y te estas tardando una eternidad.”
Mi mirada la busco y se encontró con la opuesta, mis ojos color avellana contra los cafés de ella. Mi impaciencia contra su molestia. Ella era alta, bronceada y maciza, caso muscular, con piel de cuero y cabello café oscuro como el mío. Pero donde mi cabello era largo y liso (y yo creo, sedoso) el de ella era corto y frisado, como si ella hubiera dejado los rodos del permanente puesto como por un millón de años.
“Mi nombre no es servicio o chica,” murmure. A ella, le dije en alto, “estará en un segundo señor, Ups, lo siento, señora.”
Ella frunció el ceño.
“Belle,” advirtió Ron.
Crují mis dientes, casi volviéndolos polvo, y prepare el estúpido medio-café. Todo el tiempo cantando en mi cabeza, me comportare, me comportare, me demonios comportare. Viéndole el lado bueno, al menos Ron estaba dejando pasar la visita de Sherridan.
“Bueno, debo irme antes que a súper colochos le de un ataque,” Sherridan dijo, ignorando el ceño de mi cliente. Ella se me acerco y me dio un beso en la mejilla. “Llámame si cambias de opinión acerca de los gemelos. Ellos tienen el mas lindo y apretado trasero que jamás hayas visto y si te casas con alguno – de los gemelos, no con sus traseros – todos tus problemas de dinero se acabaran.” Con eso, ella se fue.
Yo le di a súper colochos el café, pero no obtuve un gracias.
“Quiero una delgada venti vanilla, por favor,” dijo mi siguiente cliente.
“Sin azúcar?”
Su rostro mostro disgusto. “dije delgada, no sin sabor.”
Y así pasó otra hora sin piedad. Debí haber aventado mi delantal e irme con Sherridan.
“Esto no es lo que pedí,” escuche. “tus dedos tocaron el borde, así que comiences de nuevo y me hagas otro, una bebida que no este contaminada,” oí. “A esto le llamas un expreso? He bebido agua mas fuerte,” escuche.
¿Me queje? Le mezcle a alguien un swirlie (es decir, saliva en la bebida) No y no! Aunque la continua restricción me costo. Mi estomago era un nudo apretado de dolor. Mi piel se sentía demasiado apretada contra mis huesos. Un tic se había creado bajo mi ojo izquierdo. Mi espalda pulsaba, y mis pies dolían – y no por estar parada mucho tiempo. Estaba acostumbrada a eso. Mi dolor era por que no me había permitido repartir unas cuantas palizas a traseros muy necesitadas.
Si no conseguía ser la empleada de la semana después de esto …esperen. Decidí que necesitaba un descanso.
Cuando mande a mi ultima cliente a su camino, mire a Ron, quien había dejado de vigilarme lo suficiente como para voltear su atención a una mujer que lucia como si acababa de salir de una foto porno.
Ella camino lentamente frente a el, su top colgante rojo de spandex y shorts revelando mas T y A que la pagina media de la Revista porno Penthouse — no que yo haya echado un vistazo en esas revistas (cough, cough). Ron se ajusto su cinturón. Chasquee mis dedos para atraer su atención, pero el trasero con tanga ajustada lo mantuvo cautivado.
La campaña sobre la puerta sonó, anunciado el arrivo de otro grupo de clientes. Sus ojos eran feroces, y pude darme cuenta que estaban desesperados por su dosis mañanera. Si no actuaba rápido me iba a quedar atorada aquí por lo menos – menos – veinte minutos mas, y yo ya no tenia otro segundo de dulzura en mi.
Con una velocidad que Superman hubiese envidiado, comencé a cerrar mi registradora.
“Que estas haciendo?” Jenni, la empleada del año— o como me gustaba llamarla, la perra del milenio- Demando saber. Ella se encontraba en la única otra registradora abierta, una pequeña, redondeada – en –todos –los – lugares – correctos – rubia, que atraía la atención de los hombres solo con respirar. Ella había mostrado su odio hacia mi el primer dia que comencé a trabajar, tropezándome cada vez que camine cerca de ella, dándome café normal cuando pedí descafeinado.
Por que me odiaba, no lo sabia. No me importaba, en serio.
“Eres lista.” Me rasque la frente con el dedo medio, encubiertamente mandándola al diablo. “Averígualo.” Con su furioso jadeo sonando en mis oídos, camine hacia Ron y lo toque el hombro.
El salto y se agarro el corazón con la mano en el pecho al voltear rápidamente hacia mi. “Jesucristo!”
“No, soy Belle,” dije secamente.
“¿Que quieres?” gruño.
“Realmente me gustaría tomar mi primer descanso de quince minutos. Si esta bien contigo, Sr. Pretty,” añadí dulcemente.
“Es Peaty.” Volteo a su reloj. “De acuerdo. Lo que sea.” Su mirada deslizándose nuevamente a la foto caminante, ahora agachándose para recoger la servilleta que “accidentalmente ” habia botado, y sus shorts subiéndose arriba de su trasero.
Sacudiendo mi cabeza, tome las cosas necesarias para …hmm. ¿Que quería? un mocha latte, Me decidí por el Próximo flash. Yep. Eso sonaba bien. Eso era lo que tendría. Si alguien merecía Chocolate esa era yo.
“Eres una perra,” Jenni murmuro, apareció repentinamente a mi lado mesclando un té chai.
“Tus celos se están mostrando,” dije en una voz cantadita. Deposite dos chorros de expreso en mi taza,
Luego leche entera. No me gustaba la descremada. “ si hubieras dejado de estar escondiéndote para mordisquear muffins, éclairs y trozos de pastel te podrías haber dado cuenta que era hora de que alguien tomara un descanso.”
Jenni jadeo. “te diré que tengo la azúcar baja en la sangre. Yo tengo que comer.”
“Si Claro. Te creo completamente y no creo para nada que estés delirando en absoluto.”
“tu simplemente estas rogando por un pedazo de mi, ¿sabes?” ella gruño.
“no se que te dio la idea que he bajado mis estándares, pero déjame asegurarte, no lo he hecho. NO quiero ninguna parte tuya. Por cierto tienes un pedazo de masa pegada en los dientes.” Latte complete, me fui a una mesa vacía. Mientras sorbía el dulce liquido (perfectamente preparado, gracias!) fije mi mirada en la larga ventana del frente de la tienda y reí. Ah, mi pequeño interludio con Jenni había revivido mi espíritu,
Alejando la tensión acarreada por el encanto forzado.
A través del camino habían un bonito brownstone* de color pardo que tenia sus ventanas hechas en acero. Los arbustos que lo rodean fueron expertamente recortados, ajustados y cercados con un seto*. Las flores florecieron con gracia en el sol de primavera, haciendo un arco iris rosado, rojo y de oro con sus pétalos.
Pero no habían señales, ni ningún tipo de publicidad. De vez en cuando, veía a personas estacionar sus carros en el estacionamiento, y por lo que sabía, habían personas que trabajaban allí. Pero nunca he logrado saber que negocio es, además, nunca he visto entrada y salida de empleados.
Ese lugar me intriga. Siempre lo ha hecho. Yo había pensando en escabullirme muy tarde por la noche y echar una ojeada por hay dentro, pero por lo general me dormía antes de tener las fuerzas suficientes como para salir del apartamento.
Tal vez se trata de un .... Parpadeé ¿Qué demonios? Un hombre alto con una bata de laboratorio de repente salio del brownstone a su maxima velocidad, con sus ojos anchos y salvajes y su peluquin deslizandose con el viento. En un minuto ya no estaba allí y en el proximo si estaba. Con mi espalda recta, y revolviendo el borde de la taza de café. Yo parpadeé de nuevo, como si pudieran sacar la informacion de mi cerebro sobre porque corria ese hombre. El hombre se dirigio al otro lado de la calle, un hombre le toco corneta* y éste se devolvió a golpearlo.
Dos carros chocaron. Incluso desde donde yo estaba sentada, escuche el chillido de los neumaticos y como violentamente se aplastaron.
Mis ojos abiertos mientras le fruncia el ceño a los hombres que corrian a gran velocidad. aparentemente estaban cazandole, -a quien ahora corría dentro de la Utopía como si su vida dependió de ello.
La campana sono y me empuje sobre mis pies, mientras mi cafe se me derramaba. Puse la taza sobre la mesa y mire fijamente al hombre. La piel pálida, rasgos tensos, una respiración desigual, él exploró el local rapidamente.
Fijo su mirada en mi, entonces rápidamente se recuperó. A través de la distancia, nuestros ojos se bloquearon.
"¿Está bien?" lo llamé con una proyección de mi voz.
"Por favor, ayudeme" dijo él con un nudo en la garganta. Él estaba empujando la gente lejos del lugar y el balbuceo, "Ellos no lo saben. Ellos no me perseguían". Unos gruñeron "Mírenlo." Cuando el hombre me alcanzó, me agarró por mi antebrazo. El sudor goteaba de su frente; el miedo llenó sus ojos dilatados. "Tienes que ayudarme," dijo él entre pantalones vacios. " Ellos van a matarme. "
¿Matarlo? Mi boca se seco, mi sangre se estaba congelando, espinas aun calientes se deslizaban por mi columna vertebral. "Quedate aquí" le dije. "No, mejor ocultate. O no, quedate cerca. Oh, diablos. Has lo que sea mientras llamo al 911." Su broche me estaba apretado, pero tire de él y grité a la gente alrededor de mí, "¿tiene alguien un celular?" esa minima extravagancia ya yo no podia permitirmela. Yo había dado el mío encima de como una extravagancia que yo más podía permitirme ."¿Alguien?" Salté alrededor de las mesas, pero cada uno me miraba con una mirada fija. "No consumiré sus minutos, te lo juro. Esto es una emergencia." " Exijo de hablar con el gerente," dijo alguien, queriendo hacerlo, estoy segura, para quejarse sobre lo que acababa de pasar y demandar el servicio gratuito.
Entré rápidamente a la oficina de Ron y agarre el telefono. El operador me contesto a penas el telenofo repico por segunda vez y le expliqué lo que había sucedido. "Un hombre fue perseguido en este Café," dije rápidamente. " Él dice que alguien quiere matarlo." Cuando hablé una mujer grito en el fondo y un hombre gimio. "La ayuda está en camino" me prometio el operador.
El martilleo de mi corazón, y el hecho de ignorar la suplicas de aquella mujer, lograron evitar que yo perdiera el control. Estaban golpeando el área principal. Me ha ido sólo un momento, pero el Cafe parecia como si un desastre natural hubiera pasado por allí. Mesas volteadas. Sillas regadas en todos lados. Cafe derramado en el piso como un río negro con vasos de papel y servilletas, flotando en él como cadáveres.
Agitación y miedo. Los clientes del café junto con sus empleados se encontraban amontonados en una sola esquina. Sólo Ron parecía no tener miedo. Estaba abrazando a Jenni, meintras el sentía algo. ¿Estará él escondiendose? El hombre de la bata de laboratorio había huido. Los chicos que habian observado el proceso de persecusion ya se estaban calmando. Un tercer
hombre, a quien no había visto salir del Brownstone, se encontraba en la puerta, impidiendo la entrada o salida de cualquier persona. Era joven, probablemente en su mediados de los años treinta, alto y musculoso, con pelo rubio y una cara cualquiera modelo masculino habría envidiado. El observaba todo, como si estuviera catalogando cada detalle.
"Cada uno tome un asiento" dijo él finalmente con una voz muy sensata. "Ponganse comodos que vamos a estar aqui un largo rato". "¿Que ocurre?" exigi saber, ya que más nadie había hablado en voz alta despues de su orden. "¿Quien es usted?" tal ves no tuve que haber llamado la atención, no hay camino, en el infierno, simplemente, yo obedeceria.
"CIA" dijo él frunciendo el ceño y dando algún tipo de la credencial. "Ahora sientate".
¿CIA? Mi mandíbula estaba realizando una danza de caída y cierre, y la caída estaba muy cerca cerca. Había visto en la televisión a los agentes, por supuesto, pero nunca en la vida real. Sin embargo, algo dentro de mi me grito no confiar en él. Quiero decir, aun tenia la voz del ombre con bata de laboratorio en mi cabeza. Van a matarme. ¡Van a matarme! Pero... ¿y si el hombre con la bata era una persona mala que necesitaban matar? ¿O quizas el chico lindo estaba mintiendo y el bueno era el hombre de la bata de laboratorio? Lo que me confunde es tener un aneurismo* por tantas preguntas que me estoy formulando
Piensa, Jamison, piensa. Siéntate. No, corras. Siéntese. Sí, eso es lo que me gustaría hacer. No, no. Debo correr. Como he cambiado tanto de idea he estado dando pasos hacia adelante y hacia atras con el pie derecho mientras que el pie izquierdo se quedaba estatico. Paso, retroseder. ¡Maldicion! ¿Y si escojo la desicion incorrecta? habría una posibilidad muy buena de estar en los titulares de mañana como: Idiota Local Es Encontrada Muerta. " Los lamentos de los amigos de la víctima, 'Si Belle hubiera tomado un día libre como yo, se preguntan, ella todavía estaría viva' ".
Mis ojos se abrieron. "¿Qué pasó con ese tipo? El de la bata de laboratorio" El Chico Lindo cruzó sus brazos sobre su pecho y me inmovilizó con una oscura y casi hipnótica mirada. "Eso no es ninguna preocupación, por ahora", dijo, hablando a toda la sala, "tengo algunas preguntas, y me tendran que responder".
Esos ojos... eran intensos, transmitian ordenes, pero a la vez, daban un poco de miedo. "solamente llame a un policia" exhale. "Si usted nos hace daño, será llevado a la prisión y será la puta de Big Daddy*" Su mirada fija chasqueó a uno de los perseguidores con bata de laboratorio. ¿Él era una bestia de un hombre, con una espesa barba negra (¿era aquellos guisantes entre los cabellos?) y más músculos que Arnold* en su mejor momento? "Ten cuidado con eso" ¿Tener cuidado de qué?¿La bestia radeo ... a la policía? Estoy pensando tanto que no estoy escuchando lo que dicen. Mientras tanto, el otro guardia trajo sillas para todos. Excepto para mi.Yo les di una mirada amenazante peor ellos no queiran lios conmigo. Hey, eso es una posibilidad.
Pero yo no entiendo la razón por la que se contentaron con permanecer aquí en lugar de perseguir al hombre con la bata de laboratorio. ¿O lo habían agarrado ellos y lo habían llevado lejos mientras yo estaba al teléfono? ¿Por qué nos hacen preguntas, entonces, si ellos ya lo tienen?
"Aquel hombre es un criminal peligroso," me dijo El Chico Lindo. Él debe haber comprendido que yo no cooperaría si no me explicaba
"Y es su interés ayudarnos." Criminal peligroso - las palabras mágicas de mi capitulación. "Está bien, está bien", le dije a regañadientesle dare el beneficio de la duda. Tenía una tarjeta de identificación, después de todo. "Pero si alguien saca un arma y me apunta,
Voy PMS* en su trasero. "
" Tan notable, " dijo él secamente, completamente inimpresionado.
Agradecia porque la mesa que yo había ocupado antes permaneció habia permanecido intacta. Mi cafe estaba de colocado, igual que antes. Levanté la taza a mis labios y bebi a sorbos. Caliente y dulce, mucho más dulce de lo que había estado más temprano, como si el chocolate hubiera espesado. Mmm. Seguí bebiendo a sorbos, poniendome así comoda. El Chico Lindo nos preguntó uno por uno, y escribio los nombres y respuestas en un cuaderno. Como muy policíaco él era. Él preguntó a cada uno las tres mismas preguntas: 1) Nombre y dirección 2) ¿vio usted al hombre en el abrigo de laboratorio?3) ¿le dijo él algo o le dio algo?
El Chico Lindo habló conmigo mucho más tiempo y tenía para mi mas que el estándar tres preguntas. ¿Que me había hecho querer ayudar al hombre con bata de laboratorio, " el doctor, "?El Chico Lindo lo llamo asi, cuidadoso para no usar su verdadero nombre. ¿Habiamos planificamos en secreto encontrarnos más tarde? ¿Alguna vez había encontrado al doctor antes en esto?
No me molesté en en mentir. En realidad, yo no estaba segura que yo podría mentirle a este hombre. Cada vez que el dirigia esos intensos ojos marrones sobre mí, me sentía obligada eb compartir mis más profundos y oscuros secretos. No como uno lo hacía en las pijamadas, sino que su mirada te transmitia un "moriras si no lo haces". Muy extraño
¿Y sabes qué? No conseguí ninguna respuesta a mis preguntas. ¿Cuál era su nombre? ¿Por qué perseguían ellos al hombre con bata de laboratorio? ¿Qué hizo el hombre tan peligroso? ¿Iba El Chico Lindo a comerse el chocolate éclair que hurtó del refrigerador? Yo estaba hambrienta.
Por último, El Chico Lindo y sus hombres, seguieron rápidamente a los clientes. Yo había esperado que él nos amenazara si le dijéramos la prensa o alguien, realmente sobre lo que había pasado, pero él no hizo. Yo había esperado que la policía llegara (tal como fue prometido), pero ellos nunca vinieron.
Creo que a ellos le habia importado, por lo que dijo El Chico Lindo, quiero decir, él había dicho que el honbre con bata era un criminal.
Por fin nos dejaron solos, por fin. Ron, Jenni y el resto de los empleados de la utopía ayudaron limpiar el desorden. Extrañamente hemos trabajado en silencio, sin comentar nada sobre los acontecimientos. Tal vez nosotros teniamos demasiado miedo. Tal vez estabamos demasiado confusos. O quizas ambas. Como ya habiamos terminado de limpiar, aproveche y busque al hombre con bata, pero no lo ecnontre.
¡Que dia tan mierda resulto ser hoy! el unico rayo de luz que tenia y Ron decide cerrar el Cafe el resto del dia. Lo que me da la oportunidad que tanto necesitaba para escaparme a mi entrevista -
aunque con retraso.
Tal vez, si tengo suerte, me gustaría ser golpeada por un carro y podría demandar por millones.
Fin del Cap.
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